-Dijiste que no te dejara, que me quedara contigo y te lo prometí antes y pienso volver a hacerlo.- Dijo con una cálida sonrisa sin despegar la mirada de su asombrado compañero.- No voy a dejarte solo Hisoka. Gracias por salvarme nuevamente.- Y se lanzó a abrazarle sin importarle las heridas de ambos, besándolo tímidamente, acariciando dulcemente su rostro.
-Tan sólo… no te vayas de mi lado, te quiero.- Añadió con la mirada levemente iluminada el joven shinigami.
Tsuzuki rozó ligeramente las mejillas de su compañero, provocando en ellas un intenso rubor, este gesto le arrancó una sonrisa tierna. Besó lentamente los labios frente a él, apreciando cada sensación que aquel sencillo gesto le estaba provocando. Hisoka le abrazó fuertemente necesitando el apoyo y la calidez de su cuerpo.
-Quiero estar contigo siempre…- musitó al oído de Tsuzuki quien le devolvió una mirada sorprendida ante tales palabras. Al notar tal reacción comenzó a besar su cuello jugueteando sobre su tibia piel, su lengua degustaba el sabor de ese cuello que había querido probar desde hacía ya un buen rato.
Las caricias de Tsuzuki sobre su cuerpo fueron calmando sus nervios, relajándolo para que el jugueteo inicial fuera acompañado, segundos después, por caricias en la espalda y caderas de su compañero. Fue despojándolo poco a poco de sus prendas, una a una cedían para dejarle totalmente desnudo frente a él, al verlo así frente a él, no pudo hacer otra cosa que ruborizarse por completo poniéndose tenso una vez más. Tsuzuki le miró comprensivo y abrazándole le murmuró al oído.
-Si prefieres podemos sólo dormir juntos, no es necesario que hagamos nada…-
Pero de pronto fue silenciado por los labios de Hisoka quien al despegarse nuevamente añadió.
-Está bien, quiero estar contigo-
Lentamente comenzó a retirar su camisa ante la mirada expectante de Tsuzuki quien se acercó lentamente al joven shinigami para besar sus hombros dulcemente. Y arrancándole ligeros gemidos ahogados, su erección empezaba a hacerse cada vez más evidente, sintiendo molestia por la presión que el pantalón ejercía sobre su miembro....
-Permíteme- dijo Tsuzuki ayudándole a liberarse de la prenda que tanto estorbaba ahora, para sentarlo sobre la cama.
Besó el pecho de Hisoka haciéndole gemir, lo que provocó que este se apenara y llevara sus manos a sus labios para silenciarse. Sus mejillas arreboladas… todo aquel semblante era una imagen que llenaba a Tsuzuki de un intenso gozo y placer a la vez…
Las caricias sobre los muslos de Hisoka, aunado a los intensos y constantes besos que Tsuzuki repartía sobre el pecho y poco después sobre el vientre, acrecentaban con cada roce la excitación en el menor incrementando también el rubor sobre sus mejillas y la fuerza de sus gemidos, aunque aún intentaba silenciarlos con sus manos lo que le hacía verse verdaderamente hermoso al parecer de las intensas amatistas de Tsuzuki quien disfrutaba de cada gemido ahogado y cada ligero movimiento de tensión que Hisoka hacía...
Sus manos se aferraron a las sábanas al sentir la cálida lengua de Tsuzuki juguetear sobre su bajo vientre y recorrer lentamente su miembro antes de introducirlo poco a poco en su boca, el compás que iba tomando Tsuzuki estaba desesperando cada vez más a un impaciente Hisoka que, aunque tenso y nervioso, estaba disfrutando verdaderamente de aquella dulce tortura de la que estaba siendo presa… el calor que sentía en su vientre le estaba volviendo loco con cada roce, cada lengüeteada, cada caricia de las manos del mayor sobre su cuerpo…
-Ahh… yo… ahh… Tsuzuki…- gemía incontrolable Hisoka con las mejillas totalmente encendidas, Tsuzuki levanto ligeramente la mirada sin perder la concentración en saborear cada milímetro del erecto miembro de Hisoka…
El intenso placer estaba llevándolos a ambos a un éxtasis del que no habían sido presas con anterioridad, esa invasión de sensaciones en Hisoka le llevaba a murmurar entre gemidos ‘No me dejes nunca’…
Se enderezó al sentir que estaba por venirse, se aferró a los hombros de Tsuzuki cuando por fin liberó el cálido semen en los labios de Tsuzuki quien lamió el blanquecino líquido relamiéndose los labios provocando que el sonrojo en Hisoka se incrementara nuevamente…
-Lo lamento- dijo el menor apenado.
-Para nada Hisoka, eres delicioso…- dijo murmurando al oído del chico mientras se recostaba sobre él.
Al sentir la fuerte erección de Tsuzuki en su bajo vientre Hisoka emitió un fuerte gemido lleno del placer que aquel constante roce que Tsuzuki estaba llevando a cabo contra su vientre y su miembro le provocaba… los constantes jadeos de ambos en el oído del otro, aunado a las repetidas y desesperadas caricias que recorrían sus cuerpos, estaban llenándolos de un cada vez más intenso placer, Hisoka cerró sus ojos en señal de desesperación, el calor que le inundaba estaba quemándolo sin que pudiese comprender todas las sensaciones que le llegaban como fogonazo a cada instante…
Tsuzuki detuvo lentamente aquel roce para poder besar los labios de Hisoka con pasión y desesperación a la vez, Hisoka respondió aquel beso con igual pasión desenfrenada mientras su mano recorría el vientre y tomaba el erecto pene de Tsuzuki para acariciarlo arrancándole un profundo gemido que hizo sonreír ampliamente al joven shinigami…
-¿Estas listo Hisoka?- preguntó con voz grave Tsuzuki.
Aquella calidez de su aliento sobre su cuello provocó un ligero escalofrío en Hisoka quien asintió sonriente, un rápido beso y la incorporación de Tsuzuki quien acarició intensamente su cadera para después levantarla y así, facilitarse la entrada en la cálida estrechez del muchacho, quien al sentir aquella invasión emitió un ligero quejido de dolor aferrando sus manos fuertemente a las sábanas y cerrando sus esmeraldas totalmente sonrojado…
-Podemos detenernos Hisoka- dijo preocupado Tsuzuki al ver la expresión del menor quien abrió levemente sus ojos con una ligera sonrisa y dijo:
-Continúa por favor… ahhh… si…-
Tsuzuki entró lentamente en el cuerpo de Hisoka evitando lastimarlo lo más que pudiera… cuando por fin logró entrar se detuvo unos minutos para esperar que el cuerpo del menor se relajara un poco y poder proceder, acariciaba el pecho y vientre del chico quien gemía ahogadamente de nuevo, señal que ya podría comenzar a moverse en el cálido interior de su ahora amante…
El acompasado movimiento de Tsuzuki, quien se inclinaba de vez en vez para intensificarlo, le colmaba de emociones que estaban haciéndolo presa de una pasión que le dominaba desde dentro haciéndole levantarse y aferrarse al cuello de Tsuzuki mientras este continuaba aquel movimiento en su interior, besó con impaciencia los labios del mayor, y, dejándose llevar por todas aquellas sensaciones que le invadían cedió a mover ligeramente su cadera para incrementar aquel placer que estaba inundándole hasta casi perder la cabeza.
Tsuzuki apretó la cadera de Hisoka en señal de que estaba por vaciarse en su interior, el menor agitó ligeramente la cadera provocando que Tsuzuki eyaculase en su interior, la calidez de aquel semen le llevó al clímax derramando el suyo en el vientre del mayor, se desplomaron sobre el cómodo colchón de la cama, totalmente extenuados, salió lentamente del interior de Hisoka para recostarse a su lado y poder acariciarlo y besarlo a placer…
-No te vayas nunca de mi lado Tsuzuki… sin importar lo que suceda- dijo Hisoka entre besos y caricias posando su cabeza sobre el pecho de su amante.
-Te amo Hisoka, voy a estar contigo siempre…- selló la promesa besando apasionadamente los labios de su compañero y amante, con quien compartiría todos sus sentimientos y muchas noches más de amor y pasión desenfrenada.
FIN
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